Uno de los lanzamientos más calentados, en lo que va del año, fue el del Dodge Challenger SRT Demon, que luego de detalles a cuenta gotas y una cascada de videos que dejaban el lugar oliendo a azufre, por fin, fue presentado en el Salón de Nueva York y vaya que si valió la pena la espera. Esta interpretación del Challenger es simplemente demoniaca.
Este es el bólido más rápido, de cuarto de milla, y viene a poner en claro de qué se trata un muscle car, es decir, potencia bestial, su motor HEMI V8 supercargado 6.2 litros desarrolla una potencia de 840 caballos de fuerza con un empuje de 770 lb-pie de torque.
Este Challenger alcanza los 100 km/h en sólo 2.3 segundos, lo que lo convierte en el auto de producción más veloz en hacerlo.
El sello Demon no se le otorga a cualquier modelo y de su diseño encontramos la toma de aire más grande para un vehículo de producción, además de unas líneas de carácter realmente asesinas que aumentan su look de asesino serial, en fin , no nos cansamos de admirar lo hecho por los ingenieros de FCA, que no se guardaron nada para el desarrollo de este monstruo.
Serán tres mil los afortunados que lo tendrán en su garaje en Estados Unidos y 300 en Canadá, su venta arrancará en el otoño en el vecino del norte, mientras nosotros cruzaremos los dedos por que algunos lleguen a nuestro país, ¿qué quieren? soñar no cuesta nada.
Como siempre la frialdad de los números nos deja muy en claro de lo que es capaz este muscle car. Abrochen su cinturón de seguridad y encomienden su alma al santo de su preferencia.
0-50 km/h: 1.0 segundo
0-100 km/h: 2.3 segundos – el más rápido del mundo para auto de producción
Cuarto de milla: 9.65 segundos a 225 km/h
Eso no es todo los récords de rendimiento fluyen en una impresionante lista de primeros lugares para vehículos de calle:
• Neumáticos Nitto Drag radiales “Street-legal” instalados de serie para mejor tracción, 40% más fuerza de salida que con neumáticos SRT Hellcat.
• Direct Connection: mapeo de motor calibrado para gasolina sin plomo +100 de alto octanaje.
• SRT Power ChillerTM redirige el refrigerante del aire acondicionado para bajar la temperatura en el enfriador del supercargador.
• TransBrake bloquea el eje de salida de la transmisión automática TorqueFlite de ocho velocidades para contener el auto antes de la arrancada, permitiendo que el conductor aumente las revoluciones del motor y obtenga una respuesta más rápida.
• Torque Reserve aumenta la circulación del aire y las revoluciones por minuto del supercargador antes de la salida, entregando una aceleración impresionante.
• Drag Mode gradúa la suspensión, maximizando la transferencia de peso hacia las ruedas traseras para mejor tracción.
• Drag Mode Launch Assist utiliza sensores de velocidad de ruedas para detectar saltos a la salida que puedan cambiar la dirección del auto. En milisegundos modifica el torque motor para retomar la tracción completa y continuar acelerando el auto a lo largo de la pista.
¿No te bastó con eso? Agárrate.
• Supercargador más grande: 2.7 litros frente a 2.4 litros
• Presión incrementada a 14.5 psi frente a 11.6 psi
• Límite de revoluciones por minuto más alto: 6,500 rpm frente a 6,200 rpm
• Gasolina: dos bombas de gasolina dual-stage en vez de una
• Caja de inducción más grande con tres fuentes de toma de aire: Air-GrabberTM en el cofre, Air-CatcherTM en el faro y una entrada extra cerca de la llanta.
Con todo esto a quién le interesa ir al cielo, si en el infierno puedes acelerar a fondo con el Challenger SRT Demon, religiosos y tibios con el pedal derecho favor de abstenerse.